"El ser humano experimenta dolor y sufrimiento como su cuota por disfrutar en el mundo material"
El celibato es un tema poco tratado en la sociedad actual y esto ocurre porque se le considera un estado meramente practico para aquellos que optan por una vida religiosa y espiritual. En sí, el celibato es un estado voluntario de aquellas personas que no se casan o no tienen una pareja sexual. En este ámbito bien podemos llamar a un soltero célibe, si y solo si, el soltero no lleva una vida sexual, pero cabe aclarar que el término adquirió un sentido de opción de vida. En nuestra actualidad lo aplicamos a la personas que no quiere casarse y prefiere de manera permanente la soltería.

Abarcando el tema del celibato, hay un punto curioso frente al asunto de que beneficios trae y el por qué sería una buena opción. En el mundo actual hemos visto que la promiscuidad es algo normal y que somos movidos por impulsos sexuales y placenteros, la vida de celibato se vuelve en una opción hermosa si es aceptada de corazón.
Un apreciable número de personas señalan al celibato cómo un causante fuerte del abuso sexual de menores. La mayoría de personas que comenten esto son personas que entregan su vida a una idea errónea, hombres y mujeres hetersexuales que nunca han pensado si quiera en el celibato por tiempo.
La vida célibe en la religión católica se toma como un don de bendición a patrón de Cristo célibe, el maestro, pero sería más cuestión de moral y de un estudio honesto, que no será así por obvias razones, el saber cuántos ordenados que existen en el mundo son realmente vírgenes, pues el deseo de servir a Dios, en muy escasos casos aparece desde la infancia, pero en la mayoría aparecen a una edad de la cuál los disfrutes del placer sexual es muy asequible, e incluso ya en su profesión caen al placer, cosa que no culpo, igual son humanos, pero entonces ¿Qué sentido tiene?

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